Cuando le preguntan a Stella McCartney sobre en qué se inspiró para crear Lily, responde que para ella la creación de un nuevo perfume es algo visual. En el caso de éste, imaginó un campo con esta maravilla flor y desde ese punto el proyecto fue creciendo. Su nombre, por otro lado, se inspira en su historia familiar. Si bien en parte es por dicha flor, por otro lado es porque el apodo que su padre utilizaba con su madre era ese.



Perfume que refleja lo emocional para ella, se transformó en el mas vendido de la empresa por su suavidad y estilo femenino al 100%. Envuelto en un frasco atractivo que se basa en la idea de generar uno que dure un largo tiempo y genere ganas de poseer, por supuesto su base es de lilas para luego encontrarse con trufas y otras notas románticas.

Lily ya está a la venta en nuestro país en dos formatos diferentes.